ACEITE DE OLIVA

El microclima que se produce en la zona de Los Arribes del Duero, ha posibilitado, durante siglos, el cultivo de plantas, típicamente mediterráneas como la vid, el olivo y el almendro.

En esta época de otoño, entre finales de octubre y mediados de noviembre, es cuando la aceituna se encuentra en su momento óptimo de maduración y comienza su recolección.


Aunque el envejecimiento de la población y el paulatino abandono de las tierras ha hecho que desaparecieran muchos de los cultivos, todavía, la industria del aceite sigue siendo una de las mas importantes en esta zona noroeste de la provincia de Salamanca.

El 85% de la variedad de olivos que se encuentra por esta zona, así como en la limítrofe Portugal es la de "Manzanilla Cacereña" o "Negrinha" como se le conoce en el País Luso.

Se trata de una variedad poco vigorosa cuya capacidad de enraizamiento es muy elevada. Su época de floración es temprana y su entrada en producción es precoz, con una productividad elevada y constante.

La maduración de sus frutos es temprana y presentan baja fuerza de retención, que facilita su recolección mecanizada, aunque mayormente se realiza a mano.

Variedad con doble aptitud. Es muy apreciada para su aderezo, tanto en verde como en negro, por la calidad de su pulpa. Su contenido en aceite es bajo, aunque de calidad. La separación de la pulpa del hueso es fácil. Se la considera de buena adaptación a suelos pobres y al frío invernal. 


Una de las muchas recetas para su aderezo, muy apreciado es la siguiente:

Se llena un bote con olivas, bien lavadas y con agua filtrada o de pozo, ausente de cloro.
Durante diez días se cambiará el agua diariamente, con el fin de ir quitando el amargor de las aceitunas.
Una vez pasado ese período se añade una parte de agua, con otra de vinagre, una rama de tomillo y un ajo entero. Se deja reposar por seis meses y estarán listas para comer.

El aceite de Oliva de esta variedad es el zumo de dichas aceitunas, recolectadas en su envero (punto óptimo de maduración) molturadas en frio y presentando en su cata un equilibrio en el picante, amargo y dulce y un alto frutado verde que recuerda a hierba recién cortada, otros atributos positivos como el frutado a manzana verde, macedonia y tomatera, hacen de este aceite un auténtico perfume para aderezar nuestros mejores platos.

Cabe destacar la elevada concentración de Ácido Oleico, acido graso monoinsturado de la seria omega9. En el aceite de oliva se encuentra en concentraciones entre el 55 y el 80%, en el caso de la Manzanilla Cacereña encontramos valores entre el 78 y el 80%. El ácido oleico ejerce una acción beneficiosa en los vasos sanguíneos reduciendo el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares Especialmente recomendado para su consumo en crudo, ensaladas, pescados o como parte de un buen desayuno.






No hay comentarios :

Publicar un comentario